Descripción
Las cataratas se definen como nubosidades en el cristalino del ojo, que es el lente natural que tiene este órgano. Normalmente el cristalino es transparente y trabaja como un lente que enfoca la luz, para que pase a la parte posterior del ojo, sobre la retina, que es el tejido sensible a la luz situado en el fondo.
En la mayoría de los casos las cataratas están relacionadas con el envejecimiento, es decir, son más comunes en las personas mayores y pueden ocurrir en uno o en ambos ojos, aunque no se transmiten del uno al otro.
La enfermedad se detecta después de un minucioso examen oftalmológico, donde se incluye la medición de la presión intraocular y dilatación de las pupilas. Además de una ecografía (en caso de que la catarata este muy avanzada y no se pueda examinar el fondo de ojo).
QUIÉN PUEDE DESARROLLAR CATARATAS
Las personas mayores tienen más probabilidad de desarrollar la enfermedad, ya que el riesgo aumenta con la edad. Otros factores de riesgo para las cataratas son:
SINTOMAS DE CATARATAS
TIPOS DE CATARATAS
TRATAMIENTO
Las cataratas se pueden mejorar en su etapa inicial con nuevos anteojos preferiblemente de aumento y una iluminación adecuada. En caso de que no haya mejoría la cirugía es el único tratamiento eficaz, esta consiste en remover el cristalino opaco y reemplazarlo con un lente artificial, por medio de una incisión de 1.8mm a 2.7 mm en la córnea. Hay dos técnicas de cirugía para las cataratas y el uso de una u otra depende del cuadro clínico que cada paciente presente.
Después de que se ha extraído el cristalino, frecuentemente se reemplaza con un lente artificial llamado lente intraocular (LIO). Un LIO es un lente plástico transparente que se convierte en una parte permanente del ojo y enfoca la luz claramente sobre la retina, mejorando su visión. Este lente ni se ve ni se siente, pero algunos pacientes pueden tener otras enfermedades de los ojos o pueden haber tenido problemas durante la operación por lo que se les puede sugerir lentes de contacto blandos o anteojos con un grado elevado de aumento.
Es importante aclarar que las cataratas solamente se deben remover cuando la pérdida en la visión interfiere con las actividades diarias, como manejar, leer o ver televisión. El paciente debe tomar esta decisión con base en la información que le provea su oftalmólogo. Una vez entienda los beneficios y los riesgos de la cirugía, puede decidir si es apropiado o no realizarla. En la mayoría de los casos, demorar la operación no hace daño a los ojos, sin embargo, es bueno recordar que después de la cirugía la calidad de vida mejorará.
Cuando se requiere cirugía para las cataratas en ambos ojos, la cirugía se realizará en cada ojo individualmente, generalmente con cuatro a ocho semanas de diferencia. Esta es uno de los procedimientos más seguros y eficaces y en el 90% de los casos las personas posteriormente al procedimiento ven mejor.