En las festividades decembrinas, la celebración suele ir de la mano con la alegría, pero es vital recordar que ciertos riesgos pueden amenazar nuestra salud visual. Es por esto que desde Fundonal queremos hacer un recordatorio sobre dos amenazas silenciosas para nuestra visión: el metanol y la pólvora. En medio de las celebraciones y los brindis, la calidad del licor que elegimos y la manera en que interactuamos con la pirotecnia pueden tener consecuencias que van más allá de la diversión momentánea.
Es por esto, que queremos traer conciencia sobre la peligrosa conexión entre la ingesta de metanol, presente en algunos licores adulterados, y los riesgos oculares asociados con la manipulación de pólvora durante estas festividades.
La aparente euforia de un brindis puede convertirse en tragedia si no prestamos atención a la calidad del alcohol que consumimos. El metanol, ese enemigo silencioso que se oculta tras la aparente inofensividad de una copa, esta a menudo presente en licores adulterados, y no solo intoxica nuestro cuerpo, sino que también desencadena peligros específicos para los ojos. Consumir esta sustancia en algunos casos puede conducir a la pérdida de visión permanente o la perdida de la vida. La ceguera por metanol es una realidad y por eso desde Fundonal hacemos un llamado para tomar medidas de cuidado y proteger nuestra salud ocular y disfrutar estas festividades con total tranquilidad.
En el trasfondo de las festividades, la identificación de licores seguros emerge como la clave fundamental para garantizar unas celebraciones libres de riesgos. La adulteración de bebidas alcohólicas, con la presencia de metanol, se convierte en una amenaza sutil pero peligrosa para nuestra salud general y, específicamente, para la visión. Por eso compartimos una seria de consejos para reconocer posibles señales de adulteración en el alcohol:
La pirotecnia es una tradición presente en muchas regiones colombianas durante estas festividades, pero su manejo imprudente puede tener consecuencias desastrosas para la vista. Aunque es emocionante, puede causar daños irreparables a nuestros ojos. En este contexto, proteger nuestra visión y la de nuestros niños, se convierte en una prioridad. Desde el uso de gafas protectoras hasta la conciencia de las distancias seguras, nos ayudara a preservar nuestra seguridad visual.
Adoptar prácticas de cuidado al manipular pólvora, mantener una distancia segura al disfrutar de la pirotecnia, asegurar descansos visuales durante eventos prolongados, parpadear regularmente contribuyen a minimizar el riesgo de lesiones oculares. Sin embargo, en caso de sufrir algún accidente con la pólvora, lo recomendable es acudir de inmediato al médico u oftalmólogo para que puedan revisar y tratar las heridas sufridas, y sobre todo, evitar remedios o curaciones caseras que podrían afectar negativamente las lesiones.
Según las estadísticas del Instituto Nacional de Salud: Desde el 01 de diciembre de 2022 hasta el del 2 de enero de 2023, se presentaron 1.015 lesionados por pólvora pirotécnica en el país.
La mejor manera de preservar nuestra visión radica en la prevención, y la prevención nace de la educación compartida, creando un entorno en el que la luz de las festividades brille sin amenazar la claridad de nuestra vista.
Dra. María Cristina Cortes Cleves
Oftalmóloga – Directora Médica de Fundonal