Procesos oftalmológicos infantiles
Estrabismo
Miopía
Astigmatismo
Hipermetropía
Cataratas pediátricas
Ambliopía
.
En clínica Fundonal
En Fundonal, nos dedicamos a mejorar la calidad de vida de los niños mediante el tratamiento de diversas condiciones visuales, incluyendo miopía, hipermetropía, astigmatismo, cataratas pediátricas, ambliopía y estrabismo.
Nuestro equipo de profesionales altamente calificados ofrece diagnósticos precisos y tratamientos oportunos para corregir desviaciones oculares y prevenir complicaciones como la ambliopía u «ojo perezoso». Nos enfocamos en proporcionar atención de calidad y segura, contribuyendo al desarrollo visual saludable de nuestros pacientes pediátricos.
Preguntas frecuentes sobre pediatría
El estrabismo infantil es una alteración en la alineación de los ojos que provoca que no miren simultáneamente al mismo punto. Las causas pueden incluir un control inadecuado de los músculos oculares por parte del cerebro, defectos refractivos como la hipermetropía, o condiciones neurológicas como parálisis cerebral o síndrome de Down.
Los síntomas incluyen desviación visible de uno o ambos ojos, inclinación o giro de la cabeza para mirar objetos, cierre de un ojo en condiciones de luz intensa, y pérdida de percepción de profundidad. Es esencial detectar estos signos tempranamente para un tratamiento efectivo.
El diagnóstico se realiza mediante un examen oftalmológico completo que evalúa la alineación y movimiento ocular, agudeza visual y capacidad de enfoque. Se recomienda que todos los niños sean examinados por un oftalmólogo pediátrico si se sospecha de estrabismo o si hay antecedentes familiares.
El tratamiento puede incluir el uso de gafas para corregir errores refractivos, terapia de oclusión con parches para tratar la ambliopía asociada, ejercicios ortópticos y, en algunos casos, cirugía para realinear los músculos oculares. La elección del tratamiento depende de la causa y severidad del estrabismo.
Aunque no siempre es posible prevenir el estrabismo, las revisiones oftalmológicas periódicas pueden detectar factores de riesgo como defectos refractivos que, si se corrigen a tiempo, pueden reducir la probabilidad de desarrollar estrabismo. La detección y tratamiento tempranos son clave para prevenir complicaciones como la ambliopía.